TPEI: trastorno de la personalidad emocionalmente inestable

El trastorno de la personalidad emocionalmente inestable (TPEI), también conocido como trastorno límite de la personalidad, es una afección en la que se pueden experimentar fuertes oscilaciones emocionales, impulsividad y relaciones inestables.

Las oscilaciones entre diferentes estados emocionales se producen rápidamente y pueden ocurrir varias veces al día. Por ejemplo, en un momento puedes sentirte feliz, y en muy poco tiempo puedes sentir desesperación y vacío. Puede ser muy difícil predecir estos cambios.

¿Cómo es la vida con TPEI?

Cuando se tiene TPEI, suele ser difícil hacer frente a los sentimientos de abandono, ansiedad o ira. Es frecuente autolesionarse de diversas formas, ya sea física o psicológicamente. A veces puedes tener un nivel decente de confianza en ti mismo, pero al momento siguiente caes en un profundo odio hacia ti mismo. Muchas personas con TPEI también experimentan inseguridad sobre su autoimagen y tienen problemas de identidad.

Puede resultarte difícil confiar y sentirte seguro en las relaciones cercanas. Las personas con TPEI a menudo tienden a oscilar entre admirar y luego despreciar a sus allegados. Sentirse así puede ser muy solitario. Es importante recordar que hay muchas otras personas que comprenden y pueden ofrecer apoyo.

¿Cómo sé si tengo TPEI?

El TPEI se manifiesta de distintas maneras según la situación y el contexto. Según el sistema de diagnóstico DSM-5*, debes presentar al menos cinco de los siguientes síntomas:

Evitar las separaciones. Realizas grandes esfuerzos para evitar que te abandonen, tanto si la amenaza es real como imaginaria.

Relaciones inestables e intensas. Tienes un patrón de relaciones profundamente variable en el que en un momento dado puedes idealizar a alguien y luego, de repente, devaluar a esa misma persona.

Trastorno de la identidad. Tienes una incertidumbre persistente sobre tu autoimagen o identidad, y tu autoimagen cambia con frecuencia.

Impulsividad. Actúas impulsivamente de formas que pueden ser perjudiciales para ti mismo en al menos dos áreas diferentes (por ejemplo, con el dinero, en el sexo o con las drogas).

Comportamiento suicida. Has expresado o demostrado el deseo de quitarte la vida, te has autolesionado deliberadamente o has intentado suicidarte.

Desequilibrio emocional. Tienes una notable tendencia a cambiar de humor. Por ejemplo, puedes sentir ansiedad, irritabilidad o tristeza intensa que suele durar unas horas, y rara vez más de unos días.

Sensación crónica de vacío. A menudo te sientes vacío y sin propósito.

Problemas con la ira. Tienes dificultades para controlar tu ira. Puede manifestarse a través de rabietas frecuentes o irritación prolongada.

Síntomas paranoides o disociativos. Tienes pensamientos paranoides transitorios relacionados con el estrés o síntomas disociativos graves, como la sensación de estar separado de ti mismo.

Aunque reconozcas estos síntomas, es posible que no tengas TPEI. Para saber si tienes TPEI, debes someterte a una evaluación profesional. Es importante descartar que tus síntomas no se deban a otras causas.

¿A qué se debe el TPEI?

Muchas personas con TPEI han tenido una infancia muy traumática o caótica. Algunos han sido víctimas de abusos. Pero se puede tener TPEI, aunque se haya tenido una infancia segura, sin traumas evidentes. El TPEI puede estar causado por una combinación de factores genéticos, psicológicos y ambientales.

¿Qué ayuda puedo obtener?

Si padeces TEPI, puedes recibir tratamiento en forma de psicoterapia, ya sea en grupo o individualmente. Hay varias terapias diferentes que han demostrado ser útiles para el TPEI, como la terapia dialéctico-conductual (TDC) y la terapia basada en la mentalización (TBM). La hospitalización voluntaria durante una crisis ha demostrado ser un valioso apoyo para hacer frente a situaciones abrumadoras. También se te puede administrar fármacos para aliviar los síntomas.

Tienes derecho a ser informado sobre las opciones de tratamiento disponibles y a participar en tu plan de tratamiento. Es importante que estés motivado y confíes en tu terapeuta.

A menudo mejora

No es infrecuente que las personas con TEPI tengan otros diagnósticos, como TDAH o trastorno bipolar. Como ocurre con estos diagnósticos, la vida suele mejorar con el tiempo, a medida que te entiendes mejor a ti mismo y eres capaz de comunicar tus necesidades a quienes te rodean para sentirte bien.

Verificador de datos: Joachim Eckerström, investigador en psiquiatría del Instituto Karolinska.

Última modificación: 12 de diciembre de 2023

* DSM-5, Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, quinta edición.