¿Qué es una fobia específica?
Una fobia específica significa que se tiene un miedo excesivo y persistente a un objeto o una situación en particular. Cuando entras en contacto con el objeto o la situación, puedes reaccionar con ansiedad y un fuerte malestar, o pánico. Experimentar algo como desagradable no significa que se tenga una fobia. Si haces todo lo posible por evitar el miedo, y además te obstaculiza en la vida, puede serlo.
Las fobias específicas suelen surgir pronto en la vida, antes de los diez años. La excepción es el miedo a situaciones concretas, que suele aparecer después de la pubertad. Una fobia puede ser genética y se basa en nuestro comportamiento innato de huida o lucha. Para sobrevivir, aprendemos a tener miedo y a reaccionar ante ciertas cosas que pueden ser peligrosas para nosotros. En el caso de la fobia, esa función ha ido demasiado lejos.
Existen distintos tipos de fobias específicas. Puedes tener fobia a los animales y tener mucho miedo, por ejemplo, a las serpientes, las arañas, las ratas o los perros. También puedes tener fobia a fenómenos naturales como las alturas, los truenos o el agua. Otra fobia se refiere a situaciones específicas y a la claustrofobia (miedo a los espacios cerrados). Quizá te aterrorice estar en un ascensor o en un avión. También existe la fobia a la sangre y la fobia a atragantarse o vomitar. La fobia a la sangre puede hacer que te desmayes al ver sangre. Las fobias afectan más a menudo a las mujeres que a los hombres. Tres de cada cuatro afectados tienen al menos dos fobias.
¿Cómo se puede ver afectada la vida por una fobia?
En una fobia, el miedo puede entorpecer mucho tu vida cotidiana. La evitación puede dificultar tu vida tanto social como laboral. Por ejemplo, si tienes fobia a las serpientes, esto puede significar que tienes miedo no sólo de encontrarte con una serpiente, sino también de verla en la televisión o en una foto. Puede resultarte difícil estar en la naturaleza y, en casos extremos, es posible que no puedas salir de casa.
Las distintas fobias están dominadas por emociones diferentes. La fobia a los animales, como las serpientes, suele consistir en el asco y la evitación por ese motivo. La fobia a la sangre consiste en el miedo a desmayarse. Por ejemplo, puede hacer que evites ir al dentista o al médico y que no recibas la atención sanitaria que necesitas.
¿Es posible sentirse mejor?
No todas las fobias específicas necesitan tratamiento. Depende de cuánto te restrinja. Si tú o un pariente cercano experimentan un miedo tan fuerte a algo específico durante un largo periodo de tiempo que se convierte en un obstáculo en la vida, deben buscar ayuda. Con tratamiento, las fobias a menudo pueden curarse por completo. Las fobias no tratadas suelen persistir.
Pide ayuda en tu centro de salud. También puedes acudir directamente a un terapeuta cognitivo-conductual. Si tu fobia te impide buscar atención médica, como atención dental, es una buena idea ponerse en contacto con tu proveedor de salud, que a menudo sabrá dónde puedes obtener ayuda.
Verificador de datos: Robert Sigström, médico especialista y profesor asociado de psiquiatría.
Última modificación: 15 de diciembre de 2023