¿Cómo sé si estoy enfermo?
Sentirse mal a veces forma parte de la vida. Debes buscar ayuda si tus síntomas no desaparecen o si el malestar es tal que tienes dificultades para hacer frente a la vida cotidiana. Hay tratamiento disponible.
Sentirse mal a veces forma parte de la vida. Debes buscar ayuda si tus síntomas no desaparecen o si el malestar es tal que tienes dificultades para hacer frente a la vida cotidiana. Hay tratamiento disponible.
Al igual que la mayoría de la gente sufre a veces problemas físicos como resfriados o dolores de estómago, es frecuente experimentar problemas psicológicos como estrés o ansiedad. Especialmente en el contexto de acontecimientos vitales difíciles, como una ruptura o una mudanza. Estos problemas suelen desaparecer por sí solos, sin necesidad de buscar ayuda médica.
A veces los problemas pueden ser tan graves que necesitas ayuda. Los síntomas pueden llegar a ser tan molestos, prolongados o difíciles de manejar que te resulta difícil desenvolverte en la vida cotidiana. También puede afectar a las personas que te rodean, por ejemplo, si provocan arrebatos emocionales o dificultades en las tareas cotidianas. Puede tratarse de una afección psiquiátrica, como depresión, adicción al juego o TDAH. Los trastornos psiquiátricos son frecuentes: una de cada cinco personas en Suecia declara haber sido diagnosticada de depresión en algún momento, según la Agencia de Salud Pública de Suecia. Si padeces una enfermedad psiquiátrica, puede ser que necesites tratamiento para sentirte mejor.
Puede ser difícil saber qué es «normal». Aunque la mayoría de las personas se sienten mal a veces, a muchos les resulta difícil hablar de sus sentimientos. Por eso en ocasiones puede parecer que eres el único que se siente mal, aunque sea algo tan común. Es estos casos, puede ser útil hablar con personas de confianza para compartir sentimientos y experiencias difíciles.
La mayoría de las personas se siente mal a veces. Suele ser una reacción natural ante acontecimientos vitales difíciles. Puede tratarse de una ruptura, dificultades económicas o malos tratos. En tales casos, es frecuente sentirse mal mentalmente sin que se clasifique como una enfermedad psiquiátrica.
El duelo es un ejemplo de ello. Perder a alguien o algo querido puede afectar a tu estado de ánimo durante mucho tiempo. Estar triste es una reacción natural ante un acontecimiento difícil y no es lo mismo que una afección psiquiátrica. Sin embargo, a veces el duelo se convierte en depresión. En este caso, estás atrapado en ciertos patrones y puede que necesites ayuda profesional para volver a sentirte mejor. Por lo tanto, si llevas mucho tiempo sintiéndote mal, debes buscar siempre asistencia.
Si estás atravesando un periodo difícil, es bueno que busques apoyo y ayuda en las personas de tu entorno. Hablar de cómo te sientes y ayudaros mutuamente a resolver los problemas puede facilitar las cosas.
Si no te encuentra bien la mayor parte del tiempo durante varios meses, ponte en contacto con un centro de salud. Lo mismo si te resulta difícil desenvolverte con normalidad en el día a día, por ejemplo, hacer las tareas diarias o cosas que la mayoría de la gente puede hacer. Otra señal puede ser que las personas de tu entorno estén preocupadas y te digan que deberías buscar ayuda.
Busca ayuda si recurres al alcohol, al juego o a otros comportamientos destructivos —como autolesionarte— para sobrellevar la situación.
Llama al 1177 para pedir consejo médico o concertar una cita en tu centro de salud. Muchas personas dejan pasar demasiado tiempo y sufren innecesariamente, a pesar de que existen tratamientos que pueden ayudar.
Verificador de datos: Siri Helle, psicóloga, autora, oradora.
Última modificación: 08 de mayo de 2024